Hoy traemos a este rincón a Mark Lanegan, con el tema One Way Street, del disco (discazo) Field Songs, del año 2001.
Breves instrucciones para escuchar esta canción:
- En primer lugar, nacer en un pequeño pueblo de Arizona o Nevada, de no más de tres mil habitantes, rodeado de millas y millas del más árido desierto.
- Acto seguido, crecer en un hogar humilde, criado a duras penas por una madre de huesos cansados y ojos sin brillo, que trabaja demasiado y fuma aún más.
- Al poco tiempo de cumplir quince años, dejar los estudios y comenzar a trabajar el turno noche en la única estación de servicio del pueblo.
- Perder poco a poco cualquier hilacha de esperanza de que algun día algo pueda llegar a mejorar.
- Por último, manejar de madrugada por la ruta su Chevy destartalado, con las ventanillas bajas y la brisa fresca en la cara, únicamente acompañados por estos acordes, camino al funeral de ese padre al que sólo conocen por las ajadas fotografías que su madre aún guarda en esa caja de zapatos oculta en el fondo del ropero.
En su defecto, intentar lo siguiente:
- Presionar play en el reproductor en esta página web y cerrar con fuerza los ojos, agradeciendo en silencio la suerte de no haber seguido al pie de la letra las instrucciones anteriores.
Mejores dos segundos®: La tensa pausa durante el estribillo antes de que Lanegan, en esa voz plena de tabaco y whiskey, nos rompa el corazón con su queja acerca de lo difícil que resulta cantar el sonido de una calle a contramano: And you can't get / Can't get it down without crying.