- Las cámaras no sólo agregan cinco kilogramos de peso, sino que además incrementan la altura alrededor de veinte centímetros.
- Es absolutamente posible estirarse la cara hasta el punto en que las orejas se toquen cerca de la nuca.
- No importa cuán glamoroso sea uno, a cierta edad es obligatorio que la cintura de los pantalones sobrepase la línea del ombligo.
- Un lunar en el punto exacto del rostro bien puede resultar el pasaporte a una vida de fama y excesos.
- Nunca, nunca debe uno excederse en el uso de la cama solar. Nunca.